Estudiante: No me queda claro cuando comentas el cómo funcionan las cosas en la vigilia y, sin embargo, que no sean extrapolables al estado onírico.
Sesha: De no ser así, el sueño sería causal, esto es, tendría una recurrencia en dirección a su futuro, cosa que no acontece, pues donde dejas el sueño hoy, no llegarás a él en el mismo punto al día siguiente.
Estudiante: ¿Los sueños son imaginación o fantasía?
Sesha: Los sueños son fantasía pura en la mayoría de los casos. En ellos el perceptor es una fracción del soñante, al igual que el decorado de objetos que constituyen el sueño en cuestión.
Estudiante: Comentas que «La mejor forma de adiestrar la experiencia onírica es adiestrar la experiencia vigílica», pero ¿cómo se llega a esa conclusión?
Sesha: El sueño es una consecuencia vigílica, se construye con retazos de memoria vigílica. El sueño no tiene existencia fuera de la realidad en la que se construye tu quehacer cotidiano.
Solo puedes construir imágenes oníricas basadas en experiencias conscientes o inconscientes que surgen a nivel individual o colectivo, pero todas ellas generadas en vigilia.
Estudiante: Soñé anoche que me bañaba en éxtasis en el mar, recordaba que mi ropa, teléfono, dinero, etcétera, estaban en la arena, y al ir a por ellos perdía la sensación de éxtasis. El caso es que coincide exactamente con disyuntivas que estoy viviendo. Es un momento importante en mi vida, como si algo que me lleva a disolverme diera mucho miedo…, de repente ese sueño me invita a volver a mis objetos…
Sesha: Ningún objeto que dices será siquiera cercano a olvidarte del «yo». Cuando consigas esto, el asombro del propio vacío te llenará.