El Advaita ofrece una serie de respuestas sobre las preguntas fundamentales que todos nos hacemos en algún momento de la vida. Posee un basamento teórico-práctico que conduce a la solución de dicho proceso. Ofrecer una salida amable a la razón de ser, de existir, produce una tranquilidad enorme y por lo tanto un reacondicionamiento de los valores con los cuales interpretamos la vida.
Somos en la medida en que actuamos y pensamos. Al cambiar la razón esencial de nuestra propia naturaleza podemos trasformar evidentemente el mundo en el que vivimos. Lo cambiaremos en la medida en que nos cambiemos a nosotros mismos. No procederá la magia de la trasformación social si cada uno de sus constituyentes no aporta una nueva visión de la vida y se compromete con sus actos a plasmarla.
El Advaita ofrece respuestas a las insondables preguntas que por el sentido de fe no se suelen responder en occidente. Una creencia ciega y dogmática es en verdad un erróneo lazarillo en el camino de la búsqueda interior. Todos, en algún momento de la vida, deseamos entender la razón de ser de nuestra existencia. Tarde o temprano nos asalta la inquietud de una pregunta fundamental. Sin embargo, ante la indiferencia de la sociedad o de la religión para dar una salida a dicha inquietud, acabamos por dejar de lado nuestra momentánea búsqueda, trasladando al olvido aquel momento de sincera intimidad.