Desde la perspectiva del karma yoga, el gran peligro es la cadena de causalidad. Desde la perspectiva del gnana yoga, el gran peligro es la ignorancia, maya. Mientras el gnananishta se enfrenta al dilema de dirimir qué es lo real y qué lo ilusorio, el karmanishta se aboca al dilema de la recta acción a través de la ejecución de su propio prarabdha karma de una forma dhármica.
Suele decirse, y el propio Sankaracharya avalaba esta afirmación, que la primera etapa de los gnananishtas es ser karmanishtas. ¿Por qué? Porque finalmente la realización de la acción en modalidad de lugar y tiempo correcto siempre genera viveka, discernimiento. Así, los karmanishtas devienen en gnananishtas.