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Hacia un nuevo Paradigma Cognitivo

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Artículo escrito por Estrella, Terapeuta, Instructora y dinamizadora de grupos de Meditación Advaîta, Reflexión y Ceremonias del Cacao.

Es complejo vivir, pensar, sentir y reaccionar conscientemente bajo los condicionantes principios del Paradigma Ético-Moral; también, por desconocimiento, suele costar reaccionar desde un Paradigma Cognitivo.

No se concibe qué es vivir bajo la superficie marina si nunca alguien se sumergió en el mar y percibió la incontable vida que él alberga. Cierto es que lograrlo requiere condiciones diferentes para quien sobrevive en la superficie. Este símil también corresponde con los diferentes paradigmas que llevan a experimentar y actuar.

La gran mayoría hemos sido educados bajo un contexto ético-moral; es decir, una reglamentación asociada a la familia, la sociedad, la religión, etcétera. Las normas han implementado costumbres e ideologías que llevan a comportamientos personales y grupales predeterminados. Sin embargo, no existe una moral universal, los valores individuales o colectivos que nos impulsan a reaccionar son relativos, lo que genera de por sí un conflicto en función de quién determine qué es lo bueno y lo malo, lo correcto y lo incorrecto.

La moral es un mecanismo sutil de condicionamiento: bien/mal, mejor/peor, gusto/disgusto, error/acierto. La suma de dualidades se convirtió en el timón que nos ha dirigido por siglos y que nos dirige mientras la asumamos como válida. La moral causa más dolor del que intenta erradicar, pues es la causa misma del sufrimiento, de la duda o del desasosiego que supone la falta de estabilidad en las ideas, las creencias y en el propio saber y sentir.

La solución a cómo actuar correctamente ha sido perseguida por todas las culturas a lo largo de la historia; la salida a este dilema aun no ha sido satisfecha. El error es simple: se ha intentado convertir un paradigma Moral Relativo en Universal. Buscar un modelo comportamental que regule claramente la acción es fundamental y sólo lo puede lograr asociándolo a la Atención.

La Atención es don que inicia su tarea al nacer y que desprende la capacidad de conocer a lo largo de la vida. La cognición utiliza los sentidos y la mente, procurando así la capacidad de reaccionar ante los estímulos que la vida ofrece. He ahí la importancia de conocer y reaccionar sin aditivos ni conservantes ético-morales. La solución propuesta se basa en la Atención; sin embargo, no es válida cualquier forma de hacerlo.

La Atención Eficiente es la forma más estable que lleva a conocer y reaccionar. Implica una modalidad de Atención que se posa en el Presente y que, por su peculiar naturaleza, desaloja el «Sentido Protagónico», al «yo», al «Ego» como variable activa de la cognición. El Presente es la suma de eventos relevantes que la Atención Eficiente alumbra y se convierte en aquello que merece ser conocido en cada instante. De este modo, quien conoce es capaz de reaccionar también de un modo igualmente Eficiente al que denominaremos: Habilidad. La Habilidad es un tipo de respuesta cognitiva y comportamental donde se conoce y se reacciona sin duda, sin esfuerzo volitivo.

Vivir desde un Paradigma Cognitivo

Atiende al Presente, atiende en todo momento a aquello que está sucediendo, atiende al mundo o a ti mismo continua y estable de forma Presencial, y el mundo se transformará; tu realidad se modificará, la conocerás bajo una óptica diferente.

Confía y entrégate a lo que el Presente trae y responde con la naturalidad que ofrecen tus Habilidades. Las Habilidades son las herramientas con las que tu sistema se equipó desde que naciste. Las habilidades te permitirán siempre reaccionar adecuadamente al Presente

Y tal vez esto no te parezca suficiente o tal vez no lo entiendas, pero inténtalo, adáptate y experimenta por el tiempo suficiente para que tengas criterio y adoptes o deseches esta posible solución.

¿Cómo hacerlo?

Nutre tu vida con la Concentración, este es el modo más básico de la Atención Eficiente. Concentrarse es algo común en todos. Estar Concentrado es permanecer Presente. Concentrarse implica seleccionar espontáneamente la información relevante sobre la innecesaria en el momento de conocer.  Aprende a «darte cuenta» de cuándo has perdido el Presente y regresa una y otra vez a él. Que no te preocupes el qué hacer, sino el cómo conocer. Ante la Atención Eficiente la acción, el saber y el sentir se desplegarán de forma natural.

Yo estoy como tú, estoy en plena adaptación y experimentación, me llevo muchas sorpresas en este proceso, pues no es algo secuencial. A veces me veo respirando bajo el mar con naturalidad y otras me descubro escapando a tomar aire a la superficie, porque las tendencias me sacan en busca de la falsa seguridad de lo conocido. Sin embargo, esta experimentación me reporta un aprendizaje que me susurra al oído que sufro como un pez fuera del agua. Intento regresar a ese mar del que nunca nadie se fue, sino que tan sólo, por ignorancia, se acostumbró a atender la playa y más allá.

 

 

 

*Imagen de cabecera: http://Foto de Pixabay: https://www.pexels.com/es-es/foto/foto-de-lampara-colgante-luna-amarilla-207607/