La frontera del campo de cognición del estado de Concentración es aún inestable, no es reconocida. La cognición No-dual, propia del estado de Meditación es ilimitada y sin frontera.
Ni la fusión Sujeto y Objeto, Sujeto – Objeto, propia de la Concentración, son la meta del camino propuesto por el Advaita. El fin último es la identidad de todo Sujeto y Objeto, situación que emerge en el estrato más alto del estado de Meditación.
El Presente, asociado al estado de Concentración, implica la exclusión de la percepción Particular y Total. La ausencia de esfuerzo psicológico en la cognición del estado de Observación hace que Objeto y Sujeto pasen de Particularizar a Totalizar en el Presente y, posteriormente, asuman la forma no-diferenciada propia del estado de Concentración. Por ello, afirmamos que la cognición Particular y Total en el Presente es menos firme, menos estable y, por lo tanto, más relativa que la cognición propia de la Concentración.
En el estado de Concentración los contenidos que están dentro del campo de cognición son no-diferenciados y los contenidos fuera del campo de cognición aún no se reconocen, razón por la cual se encuentran momentáneamente excluidos.
Para aclarar la exclusión de contenido ocurrida en la Concentración respecto a la Meditación, usaremos un símil ocurrido con la Totalización de la Observación externa, más conocida en Occidente como concentración psicológica. En la concentración psicológica un individuo puede estar sumido, absorto, en una pantalla de cine, y fluir en la apreciación de innumerables y variables contenidos sin que exista un Sujeto que pueda localizarse independiente a la cognición. Todos los acontecimientos externos a la pantalla no son reconocidos. Los contenidos externos al campo de cognición del estado de Concentración quedan excluidos. En la Meditación, tanto suelo como techo, paredes y calles externas a la sala de cine quedan incluidos en el campo cognitivo, pues las fronteras del campo fluyen más allá del infinito.
El único estado estable en sí mismo es el No-dual incluyente, experimentado mediante la Meditación; los dos estados restantes —Observación y Concentración— son relativos e inestables.