Estudiante: ¿En qué medida el cuerpo, más concretamente el sistema nervioso, impide o favorece la posibilidad de experimentar el samadhi?
Sesha: El sistema nervioso es el mecanismo más sofisticado a nivel fisiológico del que dispone el ser humano pero, como todos los demás, tiene sus límites. Hay personas cuyo sistema nervioso puede soportar una carga de energía mayor pero siempre puede aparecer un punto en el que, de forma similar a como ocurre con los músculos que se contracturan cuando la carga solicitada excede su capacidad, los conductos nerviosos colapsan, generando diversos problemas. Esos problemas pueden derivarse de la carga de energía que repentinamente fluye por los conductos o porque estos presentan alguna anomalía, de ahí que a veces se presenten epilepsias o molestias parecidas y/o esquizofrenias, paranoias y demás patologías.
La práctica de la meditación hace que fluya más prana por los nadis, por los conductos nerviosos sutiles, contrapartes del fluido nervioso físico, y por los chakras. Es como hacer circular más corriente por un cable. Puede ocurrir que la persona no esté capacitada para sostener dicho caudal y el sistema nervioso pueda resentirse, tal como ocurre en personas con daños originados por procesos genéticos, drogas o variados tipos de excesos.
Hay personas a quienes les es más improbable alcanzar un estado no-dual, pues su nivel de atención es muy pobre. Dicha dificultad de mantener la atención al presente es un indicio de inmadurez del sistema nervioso. La atención al presente es tan esquiva como intentar no dormirse después de haber ingerido una copiosa comida mientras se está en un ambiente cálido y distensionado. El marasmo físico producido por la digestión en curso hace imposible resistirse al sueño; igual pasa con la atención al presente: cuesta mucho trabajo permanecer en él de forma continua.
¿Qué fortalece el sistema nervioso? El sueño, sobre todo el sueño profundo, reparador. El sueño profundo recarga los sistemas, recupera la energía y, en definitiva, instaura la regeneración del cuerpo. Otra condición que resulta altamente provechosa para el sistema nervioso es estar en el presente Estar atentos sin esfuerzo al presente, permanecer de forma continuada con una atención carente de tensión reconforma, estimula y masajea el sistema nervioso. Estos serían los dos factores que más ayudan: permanecer atentos al presente y dormir de manera profunda. Si uno de ellos no opera, la mente permanece inquieta y llena de duda. La agitación mental que se produce lleva incluso a consumir la energía que los órganos físicos tienen para construirse, llevando al cuerpo a la enfermedad física o psicológica.