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El presente cognitivo

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Estudiante: ¿Qué diferencia hay entre un presente termodinámico y un presente cognitivo?

Sesha: El tiempo no es solo la medida de los segundos. Hay tiempo cosmológico, termodinámico y psicológico. El tiempo termodinámico va en dirección de la entropía. El psicológico mide la secuencia de la percepción interior.

El lenguaje es sumamente limitado para describir las realidades eternas. Solemos hablar de lo que podemos pensar y viceversa. El lenguaje filosófico refleja el compendio de inquietudes que la humanidad describe como fundamentales, pero que aún no acierta a descifrar.

Puedes considerar la cognición como un campo de información, al igual que puedes ver un campo cerrado temporo-espacial como un ente con caracterizaciones similares que cumplen la primera y la segunda ley de la termodinámica. Si defines el término «información» con claridad, coincidirás que un campo de información puede representar con similitud un campo de cognición. Sin embargo, información no es digitalización.

La atención, según sea la distribución que contenga, puede representarse de variadas formas, incluso bajo la ruptura de cánones físicos o consuetudinariamente filosóficos. El catalizador de dichos procesos y de la aparición de nuevos paradigmas cognitivos es la atención sostenida en un presente cognitivo.

Estudiante: ¿Qué hay de semejante y de diferente entre el presente cognitivo del Advaita y el Ahora de Eckhart Tolle?

Sesha: El presente cognitivo define claramente cuáles son las condiciones mediante las cuales la cognición debe establecerse para que esta sea el trampolín a la percepción no-dual.

De no establecerse claramente las pautas del presente cognitivo, la experiencia se convierte en algo moral, insustancial, sin sentido e incoherente.

El presente cognitivo es la intersección entre el tiempo psicológico y el tiempo termodinámico. Es el entorno temporal que merece ser conocido y es el ambiente cognitivo al cual debe abocarse la atención para que sirva de medio a una trascendencia interior.