Estudiante: Cuando una persona tiene el Trastorno por Déficit de Atención (TDA), ¿cómo se trabaja para corregirlo, a la hora de permanecer atento donde uno desea, si la atención no depende de la voluntad? ¿Qué ejercicios recomiendas? ¿Aconsejas la medicación?
Sesha: Si la atención dependiera de la voluntad bastaría decir: «¡quiero atender!», y lo lograrías. O podrías afirmar: «¡no deseo pensar!», y controlarías de inmediato tu mente.
La mayoría de los problemas de déficit de atención no son realmente problemas estructurales del sistema nervioso, sino sobreestimulación del mismo. En muchos casos basta detener la sobreestimulación y el efecto de inquietud desaparecerá. El déficit de atención realmente tiene que ver con una debilidad del sistema nervioso que lleva a que la atención sea inestable, momentánea y caótica. Creo que medicar no mejora el sistema nervioso, en muchos casos simplemente lo adormece.
Estudiante: ¿Cómo una mente finita o limitada por los sentidos puede acceder a una cognición estable?
Sesha: Se estabiliza retirando de la función cognitiva la condición inestabilizante, el «yo». Es como retirar por destilación las sales que contiene el agua. La mente sigue entonces funcionando, pero bajo nuevos paradigmas cognitivos.
Estudiante: ¿Qué sucede con la atención en estado inconsciente?
Sesha: Un estado inconsciente no implica la inexistencia de la atención sino la imposibilidad de la mente de acceder a dicha información.
